Pues me acabo de leer su biografía en Wikipedia y no parece que se merezca tanto resquemor. Quizá se deba al simple hecho de ser mujer y, supongo que en EEUU esto no se perdona, cuando subes a los más altos niveles de la Política, reservados tradicionalmente por hombres. Incluso, cuando su marido era Presidente, se negó a ser una simple acompañante y desarrolló iniciativas y trabajos muy meritorios. Es verdad que con mucha frecuencia, sus ideas han sido rechazadas, porque afectaban al bolsillo de los ricos. Pero ha hecho y sigue haciendo propuestas que, desde aquí, parecen muy progresistas. O sea que, aparte de un marido bobo de baba, no creo que tengan nada contra ella para tanto acoso.
De todas formas, en algún sitio he leído que está bastante enferma. Bueno, pues eso, que menos furia con las mujeres que demuestran que valen más que la camarilla de plutócratas que mangonean la política americana.
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